Según estimaciones, cada año en los EEUU (el país que más desechos genera per cápita en el mundo) ¡se tiran 40.000.000.000 de cubiertos de plástico! Y como se trata de un plástico que no se recicla fácilmente, lo mejor que les puede ocurrir a esos cubiertos es acabar en un vertedero. Sin embargo, es normal que terminen siendo basura en entornos urbanos y naturales. De hecho, hay informes que indican que son uno de los 5 desechos más frecuentes en las limpiezas de playas.
Son objetos que usamos durante unos 10 minutos y que tardan hasta 200 años en descomponerse. ¿Tiene esto algún sentido?
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